El protagonista de la nueva novela de David
Foenkinos trabaja en un despacho de arquitectos y parece un
feliz hombre de familia. Una mañana despierta con un dolor de espalda
insoportable. Después de someterse a varias pruebas, los médicos no consiguen
encontrar el problema. Desesperado, acude a todo tipo de especialistas:
fisioterapeutas, psicólogos... Durante este periplo, los cimientos de su vida
empiezan a resquebrajarse: pierde su trabajo, su mujer le pide el divorcio...
Lo único que permanece es el dolor de espalda. Y es que su espalda está llena
de nudos; cada uno de los momentos tristes que ha vivido parece haberse
atrincherado en ella para siempre. Debe deshacer estos nudos, y para ello
enfrentarse a sus frustraciones: decirle a sus padres lo que realmente siente;
hablar con esa niña (hoy ya mujer) que le rechazó en la escuela; superar la
muerte de John Lennon, su ídolo… A medida que el protagonista reconstruye su
vida y descubre la felicidad, el dolor va desapareciendo.
Lo que realmente me llamó la atención de este libro fue la
sinopsis, la idea de una evolución y de un replanteamiento de la vida en una
adultez, considero que es un cambio tan radical que es difícil de efectuar.
Siguiendo esta línea recuerdo un libro que reseñé hace poco tiempo, La misma ciudad de Luisgé Martín, en el que una persona con su vida ya “planteada”
decide que ha llegado el momento de cambiar… o huir. Sin embargo las decisiones
que toman ambos protagonistas se parecen bastante poco.
Nunca he leído nada de David Foenkinos y debo decir que creo
que está no será la último, ya que su estilo narrativo me ha gustado bastante,
controlando el tempo del relato combinando diferentes momentos en un único hilo
argumental y manteniendo el interés en todo momento.
Sin embargo personalmente creo que para cambiar de vida me
acerco más al protagonista de esta novela que a la de Luisgé Martín, ya que
pienso que en la mayoría de los casos estos cambios pueden ser progresivos sin
necesidad de realizar cambios radicales que puedan afectar a gente inocente.
Pero sobre este aspecto cambio vs evolución, yo soy más proclive a la idea de
evolución, ya que considero este término más amplio e interesante, porque da la
idea de proceso.
El inicio del libro es la aparición de un dolor físico, algo
que impide el desarrollo normal de la vida, en este caso no existe medicina
externa a la que poder acudir para que desaparezca esa molestia, sino que la
solución de ese hándicap, en este caso, está dentro de uno mismo, aspecto que
nuestro protagonista descubre poco a poco al igual que se produce la
recuperación, que descubre a través de un análisis pormenorizado de su vida y
sus actos. Sin embargo hoy en día buscamos soluciones externas cuando la
solución está más cerca de lo que pensamos. Vaya me ha salido mi vena
psicológica.
Me ha gustado, sin lugar a dudas, pero me temo que este
título pasará sin pena ni gloria, y en un futuro, no sé si muy lejano, es
posible que olvide gran parte del argumento, sin embargo seguro que tendré un
buen recuerdo y opinión sobre él.
1 comentario:
Este no me lo apunto, no es mi tipo de lecturas y dudo que lo fuera a disfrutar
Besos
Publicar un comentario